Con lo primero que se dará de bruces el visitante de la vigésima Bienal Nacional de Artes Visuales, cuya inauguración está prevista para el 2 de febrero del año en curso, es con una sorpréndete instalación en la que la ciencia de la ecología y la creatividad artística se combinan armoniosamente, con el fin de ofrecer al espectador, un expresivo y novedoso lenguaje escultórico, un mensaje optimista: la anhelada respuesta, sería, barata, y extraordinariamente sencilla de ejecutar, al grave problema de la deforestación de nuestros campos Sólo a un individuo de la transparencia espiritual de Sacha Tebo (artista haitiano que desde hace muchos años ha fijado en nuestro país residencia), profesional que aúna a su fina sensibilidad de pintor, escultor y arquitecto, sólida formación científica y acendrada vocación de servicio rara en este medio, sólo a una persona de las cualidades mencionadas, repito, podía ocurrírsele la idea de esa instalación a la que ha bautizado Materia Viva.
Con ella pretende, entre otras cosas, además de dar lustre a la referida Bienal, mostrar al dominicano común y corriente su último y utilísimo descubrimiento, significativo aporte a la preservación de los estropeados y constantemente amenazados recursos forestales de Latinoamérica: el fogón ecológico.
La instalación consiste en 21 fogones, situados en el Patio Español del Museo de Arte Moderno, con cuyas altísimas chimeneas se topará el visitante a ambos lados de la escalera de acceso a dicha institución.
Semejante proyecto artístico-conservacionista, amén de pretender sembrar un impostergable mensaje de rescate de la naturaleza y de la vida en la conciencia ciudadana, está concebido, también, con el fin de recaudar fondos, los cuales, administrados por la Fundación Pro Natura, serán destinados a la creación de la Fundación EKOSOL, organismo que se encargará de la formación del personal que propague la información y las técnicas relacionadas con el uso de tan oportuna e ingeniosa estufa en las regiones rurales.
Sacha Tebo, merced a su invento, acaba de privar al mundo (al escéptico y desilusionado mundo de la postmodernidad) que el arte, la ciencia y la filantropía pueden perfectamente andar cogidas de las manos….
Felicitaciones muy sinceras.
Crítico de Arte Sr. León David.
El Caribe.